A menos de 500 metros de la Casa de Gobierno, en la avenida México, justo enfrente de la Iglesia San Felipe Apóstol y el club San Carlos, hay un filtrante brotando continuamente un caudal de aguas contaminadas, poniendo en riesgo la salud de residentes y transeúntes. Los estudiantes son los más afectados de camino a la escuela, ya que diariamente se ven en la obligación de cruzar frente al foco de infección.
El Movimiento Nacional de Acción Comunitaria (MONACO) hace un llamado a las instancias correspondientes para buscar una solución que ponga fin al problema. Los residentes de Villa Francisca, así como del resto de las comunidades del país, están llamados a demandar la solución de los problemas que les afectan, sin que ello se convierta en una válvula de presión para las autoridades competentes.
La autoridades de Salud Pública , el Ayuntamiento del Distrito Nacional y Salud Ambiental deben acudir en auxilio de los moradores y así evitar consecuencias peores a lo ya sucedido.
Los malos olores que despiden las contaminadas aguas tienen a los lugareños con el grito al cielo en reclamo de que sean tomadas en cuenta sus peticiones para se resuelva el problema, que lleva meses.
El Movimiento Nacional de Acción Comunitaria (MONACO) hace un llamado a las instancias correspondientes para buscar una solución que ponga fin al problema. Los residentes de Villa Francisca, así como del resto de las comunidades del país, están llamados a demandar la solución de los problemas que les afectan, sin que ello se convierta en una válvula de presión para las autoridades competentes.
La autoridades de Salud Pública , el Ayuntamiento del Distrito Nacional y Salud Ambiental deben acudir en auxilio de los moradores y así evitar consecuencias peores a lo ya sucedido.
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