La situación energética del país ha llegado a niveles alarmantes e insospechados, siendo motivo de gran vergüenza y atraso. Se puede decir que tocamos fondo cuando vemos historias como la del comerciante que murió mientras era operado de emergencia en el hospital Francisco Moscoso Puello a la luz de una linterna.
No ha leído mal, realmente estaba siendo operado a la luz de una linterna, pues si bien el hospital cuenta con planta de emergencia, la misma estaba fuera de servicio porque sencillamente no hay planta ni inversor que resista el embate de los apagones. Aunque este es el dato más chocante de la historia de Eddy Diloné Rosario Taveras, quien residía en Los Tanquecitos y era administrador de un colmado, hay más cosas a resaltar.
En toda la extensión de la palabra, Rosario Taveras fue víctima de los apagones con que las distribuidoras están castigando a una población con tal de presionar a un gobierno que al parecer no está cumpliendo con lo acordado. Dicho sea de paso, el lío con la luz no hay quien lo entienda, pero ya este es un tema para otro post.
Siguiendo con el caso de Rosario Taveras, el joven fue interceptado por 5 delincuentes que aprovecharon el apagón que imperaba en Andrés, Boca Chica, a eso de las 12:30 de la madrugada del lunes.
Lo que sigue a continuación demuestra que el sistema de salud tampoco sirve: al ser herido de bala, el comerciante fue llevado al hospital Darío Contreras, donde se informó a los familiares que no contaban con los equipos necesarios. A seguidas fue llevado al antiguo Morgan, donde la excusa fue que no tenía bata el médico de turno. Por último, llegaron hasta el Moscoso Puello, donde el apagón forzó al uso de una linterna durante uan operación que al final resultó inútil, quizás por todo el tiempo que se había perdido.
Cosas como estas solo se ven en un país como República Dominicana, autodenominado país de las maravillas, y con sobrada razón. Y después se sorprenden de que la gente decida irse en yola.
(*) Foto tomada el 20 de septiembre 2008 en la autopista Las Américas.
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