Ir al contenido principal

Cirugía plástica

¿Quiere una barriga plana? ¿Un busto más grande? ¿Quiere mejorar su aspecto en general? Nada como la cirugía plástica para lograr esto y más, o al menos esa es la idea que nos quieren vender los concursos de belleza, Hollywood y la industria del entretenimiento en general. A nivel local, vivimos bombardeados de anuncios que prometen maravillas con una serie de técnicas que van de invasivas a semi invasivas. Todos coinciden en presentar dudosas comparaciones de antes y después.

¿Qué está pasando? Atrás quedó eso de conformarse con lo que la naturaleza nos dio. Si una persona está inconforme con su nariz, su pecho, piernas, brazos, orejas o glúteos, siempre puede recurrir al cirujano. Salvo en los casos de la cirugía reconstructiva por accidentes, la mayoría de las veces se trata de capricho y vanidad. Es muy común que los artistas se hagan retoques aquí y allá, sobre todo porque ahora hay un afán generalizado por no envejecer.

Lo que estoy describiendo aquí empezó como una moda en países como Estados Unidos, Brasil y Venezuela, donde la cirugía y los tratamientos de belleza de "última" están siempre presentes en los círculos sociales más altos. Era solo cuestión de tiempo antes de que esa fiebre llegara a República Dominicana.

Ahora vemos muchachitas que reciben un aumento de busto a modo de regalo, ya sea por graduarse del colegio o por cumplir los ansiados 15 años. Las presentadoras locales de televisión, lo mismo que las candidatas de concursos de belleza, rutinariamente se someten al bisturí para mejorar el aspecto.

No tengo nada en contra de la cirugía plástica. Sin embargo, me llama la atención la ocurrencia de casos como el de Hermes Meccariello, quien recientemente corrió el riesgo de perder sus piernas debido a las complicaciones de una liposucción que aparentemente fue mal hecha. Poco antes de esto, se vio el caso de la mexicana Alejandra Guzmán, que estuvo a punto de morir tras inyectarse una sustancia en los glúteos con la finalidad de aumentarles el tamaño.

Si nos ponemos a buscar, encontraremos muchas historias de horror derivadas de este afán por mejorar el aspecto a través de la cirugía plástica. Gente que queda deformada, que pierde movilidad en el rostro, que sufre graves infecciones o que sencillamente muere.

No estoy diciendo que la cirugía plástica sea mala o buena, o que sería mejor no inventar con estas cosas. Simplemente creo que aquel que decida ponerse en manos de un cirujano de estos debe averiguar primero cuáles son sus credenciales, su historial, y verificar que en verdad sabe lo que está haciendo.

Así se evitaría pasar por la desagradable experiencia de Hermes, que fue tratada por un cirujano que delegó la tarea de la operación a un asistente suyo y que después, al decir de Hermes, se mostró indiferente cuando le reclamaron por cosas que parecían no ir bien. Aún cuando el cirujano en cuestión niega estas cosas, lo cierto es que han salido quejas similares acerca de este doctor.

Comentarios

  1. Siempre lo he dicho: debemos aceptarnos tal como somos porque así nos hizo Dios. Pienso que cosas y casos como esos, son castigos, que hay que tener mucho cuidado y que la cirujía plástica no puede ser el único medio para un fin. Pero bueno...

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Este blog no acepta vulgaridades. Modérese antes de comentar.

Entradas populares de este blog

¡Gracias!

Gracias a todos los que comentaron y mandaron sus felicitaciones a través del correo y servicios de mensajería. Los lectores son lo más importante en un blog, y es deber de quien escribe tratarlos siempre con respeto, lo cual se hace brindando contenido de calidad, manteniendo una postura abierta a opiniones que no siempre van a coincidir con nuestro parecer y respondiendo de manera oportuna a cualquier pregunta y/o petición que se haga. Tengo la suerte de contar con un selecto grupo de lectores que se preocupa por opinar y aportar al debate de una manera respetuosa y objetiva, sin chismes ni palabras descompuestas, que es justamente el enfoque de Grado Seis. Les reitero las gracias a todos, y por aquí seguimos en contacto.

Gente sin personalidad

Imagen: psychology studies "Tu personalidad te define". ¿Quién no ha escuchado esta expresión alguna vez? Es muy cierto: de nuestra actitud dependen muchas cosas. El éxito en las relaciones interpersonales, por ejemplo, el desarrollo de nuestras carreras profesionales, e incluso el sitial que se ocupe dentro de la sociedad a la que se pertenezca. Sin embargo, la personalidad va más allá de la actitud, y a veces viene definida en gran medida por el entorno donde se desarrolla la persona y las experiencias que le acompañan. El tema es sumamente complejo por la cantidad de variables que intervienen. Es muy fácil escribir un artículo de autoayuda donde se hablen maravillas de lo que una personalidad fuerte y bien definida puede hacer por el lector. Hay gente en esta vida que tiene su personalidad sumamente definida, que no se lleva de modas y actúa de acuerdo a sus creencias y valores. La antítesis son personas con una personalidad tan endeble que quedan a merced de cual

Dengue: lo mismo de cada año

Imagen: noticiero9.com.ar A estas alturas de juego todo el mundo sabe lo que es el dengue, cómo se transmite, cuáles son sus síntomas y cual es la mejor manera de prevenir la enfermedad. Sin embargo, cada año para estas fechas está instalado el mismo drama: emergencias públicas y privadas repletas de pacientes, reportes de muertes que van en aumento y detección de miles de casos sospechosos. Después de que los periódicos se pasan par de semanas con la misma cantaleta del dengue, entonces vienen las reacciones. Que los médicos no están aplicando el protocolo de lugar, que las lluvias de los últimos días son la causa de la aparición del mosquito del dengue y por ende de la epidemia, desmentido de cifras, llamado a la calma y un largo etcétera. Mientras se debate si las autoridades de Salud hacen su trabajo o no, la epidemia de dengue se ve reforzada por la aparición de casos de leptospirosis y malaria. ¿Qué está pasando aquí? Una combinación de muchos factores. Por un lado, escasea la hi

"La Chismosa" que tiene a todos de cabeza

En esta semana ha estado circulando por las redes sociales la foto de una supuesta cuenta por RD$352,398.00 consumida en un bar del polígono central de Santo Domingo.   El bar en cuestión se llama "La Chismosa" y no ha sido poca la gente que se ha puesto a analizar el detalle de la cuenta, que aparece en todo su esplendor en Facebook y Twitter. Entre otras cosas, la cuenta incluye el descorche de 24 botellas de champagne -que se presume fueron llevadas por el dueño de la actividad-, 15 botellas de Perrier-Jouët Rosé, 1 botella de Perrier-Jouët Mathusalem, 5 botellas de Patrón XO Café y comida variada.   Los mismos que analizan la cuenta no han dejado de escandalizarse por la cifra final, RD$352,398.00. Hay quienes señalan que con tal derroche de dinero se saca el inicial de una casa, mientras que otros se lamentan que mientras tanta gente pasa trabajo otros gasten su dinero de una manera tan fácil. Otros más -la mayoría, de hecho-, se preguntan quién o quiénes consum

La importancia de las reglas y su cumplimiento

John Crane Ltd. Aún cuando el ser humano aspira a ser libre, la realidad es que está sujeto a reglas a lo largo de su vida, algunas por vía de la sociedad en que vive y las autoridades correspondientes, otras auto-impuestas.   Sería fantástico para algunas personas no tener que vivir con reglas, no tener que seguir las normas dictadas por otro, en fin, hacer lo que le venga en ganas, cuando quiera y como quiera. Gozar de ese grado de libertad, a pesar de lo ideal que suena, no es tan idílico en la práctica. Se ha demostrado una y otra vez que la gente necesita algún tipo de estructura en su vida, un orden que le permita organizar su tiempo y sus recursos para alcanzar las metas a las que aspira.   Esta realidad la vemos en todas partes. En el hogar la mayoría de la gente tiene rituales que sigue con cierto rigor: se despierta a una hora específica que le permite preparárse para llegar a su trabajo o centro de estudios. Una vez llega a su destino, allá también hay una serie