Cannes '08 lo consagra
El premio a mejor actor que obtuvo el puertorriqueño Benicio Del Toro nos hace pensar que al cine latinoamericano le espera un futuro de buenos augurios. Siguiendo los pasos al célebre Raúl Juliá (fenecido), Del Toro reafirma que tiene madera para mantenerse en la industria más exigente del quehacer cinematográfico en los EE.UU.
Ojalá el cine dominicano rompa la crisis de pensamiento que lo mantiene estancado en temas banales y cursis que no trascienden a un aporte significativo sobre la sociedad dominicana, hoy que contamos con un verdadero amante del séptimo arte como lo es el señor presidente de la República, el doctor Leonel Fernández, esperamos conocer el proyecto de ley de cine que esta en el Congreso para su aprobación.
Lamentamos que no fuéramos convocados los egresados de la única escuela de cinematografía del país para recoger nuestra experiencia en el contenido del anhelado proyecto y de alguna manera transmitir los conocimientos adquiridos desde la primera generación de estudiantes en la escuela de cine de la UASD a las nuevas generaciones de jóvenes con deseos de aprender sobre el arte del tiempo y el espacio, "el que más pronto envejece y que a la vez nos permite expresarnos con todo esplendor" como dijera el profesor Omar Narpier.
El premio a mejor actor que obtuvo el puertorriqueño Benicio Del Toro nos hace pensar que al cine latinoamericano le espera un futuro de buenos augurios. Siguiendo los pasos al célebre Raúl Juliá (fenecido), Del Toro reafirma que tiene madera para mantenerse en la industria más exigente del quehacer cinematográfico en los EE.UU.
Ojalá el cine dominicano rompa la crisis de pensamiento que lo mantiene estancado en temas banales y cursis que no trascienden a un aporte significativo sobre la sociedad dominicana, hoy que contamos con un verdadero amante del séptimo arte como lo es el señor presidente de la República, el doctor Leonel Fernández, esperamos conocer el proyecto de ley de cine que esta en el Congreso para su aprobación.
Lamentamos que no fuéramos convocados los egresados de la única escuela de cinematografía del país para recoger nuestra experiencia en el contenido del anhelado proyecto y de alguna manera transmitir los conocimientos adquiridos desde la primera generación de estudiantes en la escuela de cine de la UASD a las nuevas generaciones de jóvenes con deseos de aprender sobre el arte del tiempo y el espacio, "el que más pronto envejece y que a la vez nos permite expresarnos con todo esplendor" como dijera el profesor Omar Narpier.
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