La campaña sucia contra República Dominicana está llegando cada vez más lejos. Se dice que el documental "The Price of Sugar", donde un supuesto cineasta estadounidense muestra las "reales" condiciones de vida de haitianos que trabajan en los cañaverales del grupo Vicini, tiene grandes posibilidades de ser nominado a los premios Oscar.Se recuerda que este documental fue realizado a instancias del padre Hartley, quien nunca trabajó a favor de los dominicanos, aún cuando fue cura párroco de San José de los Llanos, en San Pedro de Macorís. Lejos de hacer una labor en pos del bienestar de los dominicanos, el padre Hartley se centró en los haitianos, supuestas víctimas de maltrato y esclavitud en este paradisiaco país.
Durante su estadía en el país, Hartley enlodó el nombre de República Dominicana e hizo ridículas exigencias al gobierno dominicano, todo con en nombre de defender a los haitianos. "The Price of Sugar" fue el arma usada por este cura para denunciar la situación al mundo, eligiendo a Francia como escenario.
Curiosamente, en Francia cientos de haitianos desmintieron lo presentado allí, pero ya el daño estaba hecho. El grupo Vicini puso demanda contra el productor de la cinta por difamación, pero el daño ya estaba hecho. Se insiste en presentar a República Dominicana como un infierno para los haitianos. Se acusa al país de fomentar prácticas esclavistas contra esos inmigrantes, de negarles servicios básicos. La realidad es otra.
¿Se animaría alguien a hacer un documental de cómo el dominicano nunca tiene quien lo defienda? ¿Se atrevería alguien a denunciar las vejaciones que sufren los dominicanos cuando viajan a Estados Unidos, España, Curazao y otros lugares? Muchos dominicanos malviven en su propio país, ¿cómo se espera que se atiendan las necesidades de los millones de haitianos que se han cruzado? ¿Cuándo será que las grandes potencias fomentarán mejores condiciones de vida en Haití? Está bueno ya de cargarle el dado a República Dominicana.
No tienes idea cuan de acuerdo estoy contigo, es lamentable que se nos tilde de racistas y esclavistas, cuando a los hermanos haitianos se le da oportunidad de trabajo y de techo, si bien es cierto que hay empresarios inescrupulosos que se aprovechan de su situación para sacar beneficio y pagarles poco, o no pagarles nada, lo mismo pasa en el exterior contra los mismos haitianos y contra nosotros los dominicanos.
ResponderEliminarSi las naciones industrializadas se afanan en exigirnos un mejor trato para los haitianos, ¿porque no toman medidas ellos para ayudarlos a recuperar su país de la miseria, porque no toman esas mismas exigencias y las aplican a su forma de tratar a los inmigrantes?
Es muy bueno acusar a RD de racistas, pero, ¿qué me dicen de los Estados Unidos y su ley contra los inmigrantes?