Nadie quiere inmigrantes en su país

Asentamiento gitano en Triel-Sur-Seine, Francia (Daily Mail)

En todas partes hay una lucha constante contra la inmigración ilegal, sobre todo cuando la misma trae consigo más miseria y un aumento en los índices de criminalidad. 

Ahora que se acerca el 2014, la gran preocupación de la Unión Europea es que literalmente desaparecerán las fronteras y con ello ya no habrá excusa para deportar a los miles de gitanos rumanos y búlgaros que desde hace tres años deambulan por las calles de París, Berlín y Londres, donde, vaya sorpresa, no los quieren. 

De Francia, Alemania y Reino Unido viven sacando a esos inmigrantes, acusados siempre se dedicarse a la ratería, al robo de metales y, en general, a ensuciar. Esos gitanos son indistintamente descritos como personas sin costumbres, iletradas y sin ningún interés real de progresar. 

Ciertamente es penoso ver gente pasando trabajo. Pero la cosa no es tan simple. No es solo el hecho de que esa gente "esté pasando trabajo". Hay que preguntarse cómo se llegó hasta ahí en primer lugar, y la respuesta a esto es una relativamente sencilla: irresponsabilidad. 

La irresponsabilidad de la gente es la causa número uno de la pobreza a nivel mundial. En todas partes del mundo hay gente pobre y gente rica, y da la casualidad de que mientras más pobre una familia, por lo general más numerosa. Esto es la base del famoso círculo vicioso del que tanto se habla cuando se trata este tema, y eso es lo que constituye la mayor irresponsabilidad. 

La gente debería pensarlo bien antes de ponerse a formar familia. Aquellas personas que han logrado su riqueza en base a trabajo, o bien por herencia familiar, no es verdad que se van a sentir bien estando invadidos por gente hambrienta y a la que quizás no le importa qué sacrificios personales le han llevado hasta esa situación cómoda. 

Todo en la vida da trabajo. Enamorarse da trabajo, mantener una relación da trabajo, hacer amistades da trabajo, alcanzar sueños da trabajo. Vivir cómodamente, sin preocupaciones monetarias, no es algo que resulte fácil a la mayoría de la gente. En este mundo hay que pagar alquiler, servicios, educación. Si no hay forma de pagar por esas cosas, entonces no estamos en nada. 

¿De qué sirve formar una familia si no hay ni siquiera un techo digno donde cobijarla? A pesar de lo sensata que es la pregunta, a la clara no es mucha gente la que se la plantea, y por eso esta situación tan dramática de pobreza mundial, que es lo que lleva a inmigración y todas las cosas que de ahí derivan. 

En este punto habrá algunos que digan que eso no es así, que el principal problema es la desigualdad en la distribución de riquezas. Si bien esto sería lo ideal, la realidad dista mucho de eso, y esa es la que vale. Con idealismo no se logra nada, lamentablemente.