Sí, en vez de estar escribiendo acerca de gente necia e impertinente debería dedicar el tiempo a cosas más productivas. Hoy es un día que ningún dominicano puede dejar pasar por alto porque marca el 51 aniversario del ajusticiamiento del tirano Rafael Leonidas Trujillo, la persona que por 30 años manejó los destinos del país a su antojo y cuyo legado aún vemos vigente en más de un sentido. Todavía persiste en la sociedad dominicana gente que en secreto –y a veces no tan en secreto- desearía volver a los tiempos de la dictadura en el entendido de que había más orden y control en ese entonces. Este, conjuntamente con la institucionalización del estado y el pago de la deuda externa, es uno de los pocos aspectos positivos de la dictadura de Trujillo. Lamentablemente estas cosas positivas se reducen a nada cuando entran en juego los aspectos negativos del régimen, que fue notorio por una represión generalizada de las libertades y el egocentrismo de “El Jefe”, uno de los tantos títulos q
Reflexiones acerca de la existencia humana y de cómo la misma gente puede hacer la diferencia. Contenido original.