Imagen: healthyinfluence.com Fama, dinero, reconocimiento, utilidades, reputación, buena posición social. Estas son algunas de las metas que la mayoría de los profesionales tienen. Hay quienes se meten a una carrera con la intención de hacerse de un dinero, sin importale lo que haya en el medio. Otros quieren destacarse y otros tantos desean contribuir de manera desinteresada. Sin temor a equivocarme, estos últimos conforman una minoría cada vez más reducida. Cierto es que la vida está muy cara, que hay que buscar dinero para pagar luz, agua, teléfono, comida y gasolina, en caso de que se tenga un vehículo. Cualquier pieza de ropa de calidad regular cuesta mil pesos, una computadora sin monitor cuesta 30 mil pesos, cualquier vehículo sobrepasa el medio millón de pesos. Esa es la realidad de estos tiempos, por tanto se entiende y se justifica que la gente desee sacarle algún provecho monetario a sus conocimientos y habilidades. Aún así, debe haber límites éticos que cada person
Reflexiones acerca de la existencia humana y de cómo la misma gente puede hacer la diferencia. Contenido original.