Ya lo había advertido Esopo en una de sus fábulas: no se puede complacer a todo el mundo. Y hay por ahí un refrán que si bien no significa exactamente eso, va por esa misma línea: "Palo si bogas y palo si no bogas".
La situación de inseguridad que venimos expresando los dominicanos ante el aumento de la violencia, delincuencia y drogadicción ha dado como resultado una serie de medidas por parte del gobierno, siendo la más reciente de ellas la designación de un nuevo jefe de la Policía. Dicho cambio se hizo en respuesta a las demandas de la población, que varias veces exigió un cambio por considerar al anterior incumbente como "muy flojo".
Ahora que se hizo el cambio, se ve la diferencia. Basta con leer un periódico para enterarse de las últimas persecuciones de la polícia, persecuciones en las que ha tenido éxito, sea apresando o ultimando a los presuntos delincuentes. Pero, tal como se ha demostrado anteriormente, es difícil complacer a la gente.
Ya la queja no es porque sea flojo el nuevo jefe de la Policía, todo lo contrario, hay quienes opinan, como tuve la oportunidad de escuchar esta mañana en un programa de radio, que el hombre está rayando en el abuso. De ahí que uno se pregunta, ¿y qué es lo que quieren? Si se quedan de brazos cruzados, es malo. Si hacen algo al respecto, malo también.
No estoy de acuerdo con matar gente. Pero estos delincuentes que han caido en manos de la Policía no son santos tampoco. Son personas a las que no les importa matar a quien se interponga en su camino con tal de hacer sus fechorías.
Lo que se quiere es que se haga justicia y también de que el policía tampoco se estime superior ante la población.
ResponderEliminarAsí es. La idea no es que la policía meta miedo al común de la población, pero si que actúe con fuerza y determinación. Es como digo, si un delincuente te encuentra por ahí no lo piensa dos veces para matarte. Si hay un robo o atraco en proceso, tiene que haber respuesta contundente de parte de la policía.
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