Uno de los carteles usados en protesta realizada en Puerto Príncipe en 2013 (Listín Diario) |
Antes de comentar sobre la vieja acusación de que República Dominicana es un país "racista", una sola pregunta: ¿qué país no lo es?
- En Estados Unidos los invasores blancos prácticamente exterminaron a los indígenas nativos y después segregaron a los negros y denigraron a los latinos. ¿Que ha habido avances en esa dirección, al punto que hay congresistas latinos y un presidente negro? Eso es cierto, pero siguen representando una minoría maltratada y los choques aún se dan en comunidades como Ferguson. El KKK sigue haciendo de las suyas y, en general, no quieren inmigrantes, pese a que se benefician de su presencia.
- Dentro de la Unión Europea, Rumanía es el patito feo. Cómo llegó a formar parte de ese conglomerado es algo que todavía muchos analistas de estas cuestiones se preguntan, y lo cierto es que nadie los quiere por ser una partida de personas pobres, sin educación, oscuros, de costumbres e higiene dudosas que improvisan "hogares" en cualquier sitio y se dedican a la ratería. La política de fronteras abiertas ha probado ser tremendo dolor de cabeza por esta gente.
- En Africa las tribus viven matándose entre sí por cuestiones culturales y territoriales, pese a que son todos negros y de origen similar. Esto no es nuevo y se daba también entre indígenas, según se nos enseñó en el colegio. Lo mismo ocurre en Micronesia y Polinesia.
- Hay dos coreas. ¿Por qué? Son prácticamente la misma gente, compartiendo el mismo origen, pero con ideologías muy diferentes. Las tensiones entre Corea del Sur y Corea del Norte siempre están presentes, de la misma forma que Taiwán y China tienen severos encontronazos de vez en cuando.
- ¿Y qué hay del Medio Oriente? El común de la gente no sabe distinguir entre esos árabes, como les llaman, pero eso para ellos es una ofensa. Un iraní no es lo mismo que un iraquí y, dentro de esas sociedades, no es lo mismo ser un shiita que un sunnita. Ahí viven matándose entre sí, por cuestiones de ideología, y viven de paso declarando la guerra a Occidente. ¿No es eso ser racista también?
- Entre los asiáticos es también una ofensa de marca mayor confundir las etnias. Llamar "chinito" a un coreano o japonés es suficiente para obtener una respuesta fuera de tono.
¿Somos racistas realmente? En el sentido amplio, la respuesta es NO. ¿Que hay una tendencia a rechazar a los haitianos porque sistemáticamente abusan del país y nunca están satisfechos? PUEDE SER.
Así como ellos nos acusan de ser racistas, podríamos decir que el haitiano es un estado fallido que no es capaz de proveer un mínimo de condiciones a su propia gente y que históricamente se arrima de otros países y organismos internacionales, siempre en el papel de víctima.
Aunque esto sea cierto, si República Dominicana osara pronunciarse en esos términos no tardan ni cinco minutos en caerle encima, alegando que es un estado contestatario y que no quiere ver la realidad.
Entonces, mientras pasa esto y recibimos toda la presión del mundo, de Bahamas y muchísimos otros sitios más viven deportando haitianos que entraron ilegalmente a esos territorios. ¿Y entonces? ¿Por qué no los dejan que hagan vida ahí bajo el principio de la solidaridad fraterna? No. Eso nunca. Cada cual que se defienda como pueda, o, en su defecto, mandémoslos a donde siempre están dispuestos a acogerlos, aunque sea bajo protesta. Qué bueno es así, ¿eh?
La realidad es que el caso haitiano no tiene nada que ver con racismo, independientemente de que lo que quieran pregonar las ONGs y organismos internacionales. No. La verdadera cuestión es económica, porque no es cuento que ese millón mal contado de haitianos indocumentados se comen una parte importante de los recursos, y esto será una realidad sin importar dónde ocurra y aunque los ilegales sean rubios y ojos azules. Simplemente eso es insostenible, pero es más fácil atacar con excusas baratas como racismo.
La realidad es que el caso haitiano no tiene nada que ver con racismo, independientemente de que lo que quieran pregonar las ONGs y organismos internacionales. No. La verdadera cuestión es económica, porque no es cuento que ese millón mal contado de haitianos indocumentados se comen una parte importante de los recursos, y esto será una realidad sin importar dónde ocurra y aunque los ilegales sean rubios y ojos azules. Simplemente eso es insostenible, pero es más fácil atacar con excusas baratas como racismo.
Comentarios
Publicar un comentario
Este blog no acepta vulgaridades. Modérese antes de comentar.