La ciudad de Santiago ha cambiado en pocos meses a nivel de ornato y limpieza. En contraste con anteriores visitas en este mismo año, los parques lucen descuidados, el casco histórico se ve más sucio, vi mucha basura y hay un descuido generalizado.
Letreros con la cara del actual síndico con la leyenda "100 días y +" compiten en protagonismo con unos enormes contenedores amarillos de basura que además de afear el entorno están mal ubicados, pues la mayoría de las veces toman la acera y parte del carril. También, a diferencia de otros años, fue notoria la ausencia de una decoración navideña en la Calle del Sol y otras aledañas (la foto que acompaña este escrito es de años anteriores).
En contraste, Puerto Plata ha recobrado su esplendor, y mucho gusto me dio ver en la mañana del 25 de diciembre a una brigada de hombres lavando el muro que divide los carriles a la entrada de la ciudad. Ya en otro post hablaré un poco más acerca de la buena impresión que causa Puerto Plata al día de hoy.
Comentarios
Publicar un comentario
Este blog no acepta vulgaridades. Modérese antes de comentar.