Foto: silive.com
En un país donde el transporte público es una tragedia, se entiende el afán de la gente por comprarse su propio vehículo, aún sea financiado y haciendo líos para pagar el inicial. De tantos abusos que cometen los miles de choferes iletrados y los sindicatos que ellos representan, con sus unidades destartaladas y contaminantes, cada día es más la gente que aprovecha las ferias de vehículos que hacen los bancos, aún cuando ello signifique meterse en un lío para pagar el inicial.
Sí, tener vehículo propio es lo mejor en un país donde no hay cultura de transporte público y en donde los choferes de concho se han convertido en los dueños de la finca. Sin embargo, una vez se compra un vehículo haciendo toda clase de sacrificios, surgen otros problemas. En una ciudad donde los parqueos son escasos como perlas, ¿dónde dejarlo? En una ciudad tan congestionada y de conductores tan malos, ¿cómo evitar que le rayen el vehículo pendejamente?
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Da vergüenza que ni siquiera en donde uno trabaja tenga parqueo asegurado, con todo y que supuestamente está asignado. Restaurantes, tiendas, plazas, bancos, consultorios médicos y establecimientos en general casi nunca contemplan área de parqueo, con la consecuencia de que las calles aledañas parecen un parqueo público, con vehículos estacionados a ambos lados. Después aparece el vehículo rayado o abollado, y no se sabe de quien es la culpa.
Manejando por cualquier avenida, calle o callejón, lo más probable es que alguien roce por venir en vía contraria, por meterse sin mirar y sin corresponderle el turno o simplemente porque sí, porque hay gente que maneja no a la defensiva, sino para acabar con todos.
Después que se hace una inversión en vehículo, duele que estas cosas pasen. Aquí lo que se necesitan son vehículos desechables, para que así duela menos.
bueno colaborando tengo para decirte que soy empelada de un banco y tengo que salir de mi casa a las 7 am para conseguir un parqueo cerca del banco en la calle!!! porque los parqueos que tiene el banco solo son para los gerentes y subgerentes(que son 3 gatos) y los clientes tienen solo unos 20 parqueos y el resto de los parqueos que son 100 de 41 asignados estan vacios.....osea que ni los clientes ni los demas empeleados tenemos parqueo suficiente y estamos expuestos a que nos roben los espejos, nos rayen el carro, lo choquen y lo peor nos roben el carro porque los fabulosos presidentes de las instituciones no quieran hacer parqueos para uso de sus clientes y empleados....
ResponderEliminarAsí es Dilia, ellos están muy cómodos, y el resto, búsquesela como pueda. Entonces, cuando pasa algo, como que rayen el carro, se lo roben o nos atraquen, nadie, ABSOLUTAMENTE NADIE, responde. Que bonito.
ResponderEliminarRocio la queja es muy válida, pero cuidadito, no vayas a vender el carro.
ResponderEliminarAy, mija, me han sucedido tantas cosas en la calle, que opté por hacer el liazo del siglo (que todavía pago) para comprarme un vehículo que me diera lo menos problema posible. Cuando compré el primero, trabajaba en un banco que por lo menos, como era en la principal, pagaba parqueos adicionales para el empleado (no del todo contenta, porque era como a 2 esquinas) y ahora donde estoy, tenemos que pagar $500 para poder dejarlo en un lugar (que no es seguro). Y de ahí, si me voy a que los sueldos aquí son una misera, en una nación donde hay que pagar por todo, el tener un vehículo no te evita otros gastos adicionales como son revista, seguro, impuesto a la placa, cambio de aceite, revisión periódica y el fuetazo que venga después de eso.
ResponderEliminarTe aseguro que si el transporte público de aquí fuera organizado y confiable, le daría un sumbón grandísimo a ese problema llamado vehículo...