Barandas destrozadas, hoyos en el asfalto, polvo acumulado a las orillas, áreas verdes cenizas y resecas, puentes en mal estado. Todo esto y más puede observarse en la carretera Duarte y la autopista Joaquín Balaguer, la que lleva de Santiago a Puerto Plata y viceversa. Aquí van las imágenes, que hablan por sí solas.
Gracias a todos los que comentaron y mandaron sus felicitaciones a través del correo y servicios de mensajería. Los lectores son lo más importante en un blog, y es deber de quien escribe tratarlos siempre con respeto, lo cual se hace brindando contenido de calidad, manteniendo una postura abierta a opiniones que no siempre van a coincidir con nuestro parecer y respondiendo de manera oportuna a cualquier pregunta y/o petición que se haga. Tengo la suerte de contar con un selecto grupo de lectores que se preocupa por opinar y aportar al debate de una manera respetuosa y objetiva, sin chismes ni palabras descompuestas, que es justamente el enfoque de Grado Seis. Les reitero las gracias a todos, y por aquí seguimos en contacto.
debiera haber un organizmo concentrado en darle mantenimiento a las carreteras. Tanto que cuestan hacerla, para luego verla caerse a pedazos.
ResponderEliminarEs Obras Públicas que está supuesto a encargarse de eso, pero... es una historia vieja esta. :S
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